Fabricación de la bomba
En esta reacción, cada neutrón parte un átomo de uranio, liberándose energía y desprendiendo otros neutrones que, a su vez, dividen otros núcleos de uranio. Al estallar la pólvora, provoca el choque de dos masas de uranio y al unirse, exceden la masa crítica y desencadenan una reacción de fisión.
La imagen de la izquierda representa a la bomba atómica lanzada en Hiroshima y se compone de un detonador, fuegos detonadores, la carga de explosivo convencional, una cuña cónica de uranio que actúa como un percutor y la masa de uranio.
Una bomba atómica es un dispositivo que libera una gran cantidad de energía a través del proceso de fisión nuclear. Esta bomba utiliza un explosivo convencional para comprimir un nucleo radioactivo hecho de uranio o plutonio.
Dentro de la bomba, el núcleo radiactivo está rodeado de una envoltura de cable de TNT. La envoltura exterior de TNT se detona por todo el núcleo y esto comprime al uranio o plutonio en sí mismo hasta que se alcanza una “masa crítica”. Esto sucede cuando los núcleos están tan apretados que los neutrones no pueden escapar sin chocar con cualquier otro átomo.
Tras esto, el fraccionamiento de los átomos se acelera, generando una reacción en cadena. La liberación de energía crea una explosión de efectos devastadores. Calor y radiactividad son liberados en grandes cantidades.
La bomba lanzada sobre Hiroshima tenía un núcleo de 130 libras de uranio-235, y ha creado una explosión equivalente a 13.000 toneladas de TNT. En cambio, la de Nagasaki, tenía un núcleo de 14 kilos de plutonio-239, equivalente a 21.000 toneladas de TNT.